Cortijo de la viña

El Cortijo de La Viña es un lugar emblemático en plena vega granadina. Se trata de un cortijo transformado en casa rural que dispone actualmente de 7 habitaciones con todas las comodidades. Luminosos cuartos de baño, calefacción y agua caliente funcionando con energías renovables: aerotermia y placas solares.

HISTORIA

Se trata de un conjunto compuesto por dos unidades vinculadas a sendas patios de labor y que se disponen asociados longitudinalmente.

La primera unidad cuenta con el núcleo de habitación en su frente principal, con la vivienda del señorío presidiendo el conjunto. Esta cuenta con dos plantas de altura con huecos verticales ordenados axialmente, enrejados y con tejaroz; desplazado del eje principal se eleva un cuerpo con galería de arcos a manera de torre secadero. A un lado de la vivienda existen restos de otras construcciones. Tras el señorío aparece un patio al que se vinculan dependencias de labor (almacenes, cuadras, pajares, etc.). Una de las naves ha sido transformada en secadero de tabaco aunque su función originaria bien pudo ser la de molino.

La segunda unidad consiste en un conjunto de edificaciones que albergan funciones agrícolas dispuestas en torno a un patio. La fábrica aparece enjalbegada y su antigüedad no es conocida aunque podría fecharse en torno a finales del siglo XIX o principios del XX, si bien al conjunto ha sufrido continuas remodelaciones para facilitar su remodelación.

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CURIOSIDAD

Cúllar Vega estuvo vinculada al cultivo de la remolacha desde su introducción en España. La primera experiencia, a partir de la cual se inició el cultivo en España, se llevó a cabo en el Cortijo de la Viña, cuyo propietario era D. JUAN LÓPEZ-RUBIO PÉREZ, principal impulsor de la remolacha. Este farmacéutico, nacido en Alajar (Huelva), llega a Granada en 1854. Obtiene aquí la licenciatura en Farmacia en 1857, y el doctorado en 1872. Nada más licenciarse, consiguió establecerse como farmacéutico en el granadino Puente del Carbón, y pronto su botica se convierte en una de las más importantes de Granada. Con los primeros ahorros obtenidos, D. Juan López-Rubio compra el Cortijo de la Viña, que se convertirá en el primer campo de experimentación del cultivo de la remolacha en la vega de Granada. En 1878 formaba parte de la "Comisión de la Sociedad Económica de Amigos de Pais para el cultivo de la remolacha en la Vega".

Localización